Cómo realizar el traspaso de negocios

Para traspasar un negocio, las partes interesadas deben firmar un contrato de cesión que incluya los activos, maquinaria, mobiliario, inmueble y todo lo que contenga el local que se precise para la actividad económica. Por norma general, en el precio también se incluye la infraestructura, la licencia, el stock y la clientela.

Es decir, para poner precio al traspaso, ambas partes deben valorar:

• Antigüedad del negocio: el tiempo de vida del negocio dará pistas de la consolidación de su imagen y su clientela. Aunque aumente el coste de la inversión inicial, supondría ahorro a medio plazo de gasto en marketing y publicidad al ser una marca reconocida.
• Inversión inicial: el precio fijado del traspaso.
• Libros contables y declaraciones tributarias: informarán de si la empresa a traspasar está al corriente en pagos.
• Evolución de la actividad del negocio: una marca que lleve tiempo en activo tendrá una imagen, y ésta puede ser buena o mala. Si la actividad del negocio ha sido de mala calidad, aumentará el coste de la inversión en mejorar su imagen.
• Clientes, proveedores, créditos, volumen de facturación, inventario de inmuebles, maquinaria y vehículos.
• Licencias, permisos y contratos: todos los documentos deben estar autorizados y vigentes.
• Valor de la marca comercial y su situación en el mercado: sabiendo la antigüedad del negocio y la evolución de la actividad, se podrá estimar el valor del negocio.
• Subrogación empresarial: en caso de que el negocio a traspasar cuente con trabajadores ya contratados, la parte adquiriente será el nuevo responsable y deberá mantener los contratos, las condiciones de trabajo, antigüedad y derechos adquiridos.

Algunos de estos aspectos son difíciles de tasar, como la cartera de clientes, por lo que será importante investigar la evolución de la empresa y su rentabilidad actual tanto para fijar el precio como para estimar si se amortizará la inversión.

En caso de traspasar el local de un negocio cuya propiedad es de la parte cedente, se debe hacer una valoración solo del negocio y se pagará el precio por ese acuerdo. Por otro lado, en el caso de contar con un local, debe establecerse un contrato de arrendamiento de dicho local del que el cedente es el arrendador.

Si con la obtención del negocio entra el contrato de alquiler del local, se puede realizar el acuerdo sin necesidad del consentimiento del arrendador (por norma general, el propietario), siempre y cuando el acuerdo esté sujeto a la Ley actual de 1994. También se informará al arrendador del acuerdo del traspaso en el plazo de un mes desde la firma, y tendrá derecho a elevar la renta hasta en un 20%.

Si la titularidad del contrato de arrendamiento pertenece a una sociedad, solo cabría proceder a la compra de las acciones de la misma, por lo que no se consideraría cesión o traspaso, ya que no habrá cambios en la relación jurídica existente.

1. Valoración del negocio: a través del estudio de la evolución de la actividad y su antigüedad.
2. Negociación entre traspasador y adquiriente: ambas partes deben llegar a un acuerdo económico para que se realice el traspaso.
3. Acuerdo del traspaso: con entrega de señalización. Generalmente un 10% del importe del valor del negocio para la compra.
4. Informar del acuerdo al arrendador del local donde se realiza la actividad económica con al menos un mes de antelación.
5. Tramitación de certificados: hay que asegurarse de que el cedente está al corriente de pagos y con todos los permisos y autorizaciones en vigor.
6. Contrato definitivo: la parte cedente y adquiriente firman el contrato de traspaso.
7. Actualizar la licencia de la actividad: la parte adquiriente debe informar a las instituciones públicas que ha cambiado el titular del negocio.

Es muy importante revisar muy atentamente el contrato vigente del negocio ya que podemos descubrir situaciones que dificulten el acuerdo del traspaso del negocio.

¿El contrato no especifica o remite directamente a la ley el acuerdo de traspaso?

En este caso se podrá traspasar el local sin que nadie tenga que autorizar la operación previamente. Eso sí, hay que informar fehacientemente al propietario del local o arrendador con un mes de antelación y éste tendrá derecho a elevar la renta vigente hasta un 20%.

¿En el contrato pone que para ceder o traspasar el local es necesaria la autorización del propietario?

Si el contrato está celebrado con anterioridad al 1 de enero de 1995 y por tanto, sujeto a la Ley de Arrendamientos Urbanos de 1964, se debe solicitar la autorización al propietario quien puede exigir una contraprestación a cambio de permitir que se lleve a cabo la operación.

Si está sujeto a la Ley de 1994, no será necesaria la autorización pero sí hay que informar al arrendador quien puede subir la renta vigente un 20%.

¿El contrato prohíbe la cesión?

De nuevo hay que fijarse a qué ley está sujeto ya que si es un contrato anterior al 1 de enero de 1995, no se puede hacer nada.

En todo caso, es importante contar con un contrato escrito que defina bien y de forma estructurada, los derechos y obligaciones de cada parte. Siempre puede contar con la ayuda de un buen asesor que te facilite este trámite y en asesorias.com puedes encontrar los mejores profesionales.

Primero que todo, hay que asegurarse de que el cedente está al corriente de pagos en la Seguridad Social, Hacienda, préstamos bancarios o créditos, etcétera.

Tras firmar el contrato de cesión de la actividad, hay que acudir al Ayuntamiento para cambiar la titularidad de la licencia de apertura del local. Dependiendo de la Comunidad Autónoma a la que se pertenezca, habrá que aportar determinada documentación:

• DNI de la parte cedente y del adquiriente. En caso de que el adquiriente sea una sociedad, habrá que aportar la fotocopia de la escritura de constitución y de los poderes de quien firme.
• Fotocopia de la licencia anterior.

La parte adquiriente deberá darse de alta como autónomo. En asesorias.com también explicamos todos los pasos para darse de alta como autónomo.

A continuación, hay que actualizar la licencia de actividad en el Impuesto de Actividades Económicas y la licencia de apertura.

En cuanto a los impuestos, el traspaso de negocios está exento de IVA siempre que se vaya a continuar con la actividad económica, por lo que el arrendatario y parte cedente, debe emitir una factura sin IVA del importe del traspaso a la parte adquiriente. Si los bienes del traspaso se venden por separado, entonces sí están sujetos a IVA a excepción de los inmuebles que tributan al ITP. Respecto a la tributación en el IRPF, se declarará como ganancia patrimonial.

Si el propietario recibe una parte del traspaso, deberá declararlo como rendimiento del capital inmobiliario en su declaración de IRPF, y puede aplicar una reducción del 40% al tratarse de una renta obtenida de forma irregular en el tiempo.

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