Una residencia de ancianos es un centro destinado a ofrecer a sus residentes la asistencia que precisen. ¿Quieres abrir un negocio destinado al cuidado de las personas mayores? En este artículo te mostramos cómo montar una residencia de ancianos: pasos previos, requisitos, trámites y normativa aplicable.
¿Quién puede montar una residencia de ancianos?
La primera pregunta si quieres ser un emprendedor gerontológico es: ¿puedo montar una residencia de ancianos?
Lo cierto es que cualquier persona puede montar una persona para personas mayores, si solo va a figurar como propietario del centro.
Sin embargo, si tu idea es trabajar, o más aún, ejercer como director asistencial de un centro de atención a la tercera edad, debes tener como mínimo una diplomatura universitaria, preferiblemente en el ámbito de la salud o ciencias sociales.
Es decir, cualquiera puede ser el propietario de un centro de día o centro de asistencia a la tercera edad, pero para ejercer hay que tener formación específica.
Pasos previos para abrir una residencia para personas mayores
Antes de montar una residencia de ancianos hay que pasar por una serie de fases previas. En ellas se define el modelo de negocio, se estudia el mercado, y se comprueba la viabilidad del proyecto.
Definir el modelo de negocio
Se puede abrir una residencia de ancianos de diferentes maneras:
- Gestionando un nuevo centro adquirido por una promotora.
- Comprando o alquilando un centro ya existente.
- Adquiriendo un local para abrir un negocio desde cero.
- Acudiendo a concurso público para conseguir la autorización para construir/gestionar un centro para mayores.
A su vez, existen diferentes tipos de centros de asistencia a la tercera edad, entre los que se pueden citar:
- Residencias de tercera edad
- Residencias de cuidados geriátricos
- Centros de día
- Centros de terapia ocupacional
- Servicios de asistencia a domicilio
- Etc.
Por tanto, antes de empezar con los trámites para montar una residencia de ancianos, primero hay que decidir qué tipo de centro quieres abrir, y bajo qué modalidad.
Elaborar un estudio de mercado
Un estudio de mercado es imprescindible para analizar las variables del entorno que pueden influir a la hora de montar una residencia de ancianos:
- Situación geográfica: la ubicación es uno de los factores fundamentales. ¿Es una zona con alta esperanza de vida? ¿Tiene una población envejecida? ¿Está cerca de accesos a carreteras o vías principales?
- Contexto socio-económico: los alquileres de plazas en las residencias de ancianos rondan los 1.000-1.500 euros, por lo que es imprescindible conocer el poder adquisitivo de los habitantes de la zona, no solo de las personas mayores, sino de hijos, nietos u otros descendientes.
- Perfil de los residentes: está claro que es un negocio destinado a las personas mayores, pero también influye el perfil de sus familias.
- Competencia: ¿hay muchos otros centros de atención a personas mayores? ¿Qué tipos de servicios ofrecen? ¿Llevan mucho tiempo en la zona?
- Precio: hay personas mayores que tienen unas pensiones de jubilación bastante bajas, por lo que hay que tener en cuenta si se pueden poner precios que permitan ser rentables y, a la vez, competitivos.
Analizar la viabilidad del proyecto
Otro paso previo indispensable antes de crear una residencia de ancianos es elaborar el Plan de Viabilidad. Este análisis define el proyecto de negocio y sirve para valorar su rentabilidad potencial.
- Organización y estructura: ¿qué profesionales son necesarios? ¿Cómo se va a organizar el centro? No es lo mismo un centro de día con fines recreativos, que una residencia geriátrica en la que se brinden servicios médicos a los ancianos.
- Objetivos y metas: hay que ponerse metas realistas. Además, si el único objetivo del centro es ganar dinero, irá mal encaminado desde el principio. Un negocio de este tipo debe tener como base la mejora de la calidad de vida de las personas mayores, e ir creciendo gracias a que ofrece la mejor asistencia posible.
- Imagen de marca: otro paso importante es definir la imagen de marca. Es básico tener en cuenta que en este tipo de centros de valoran aspectos como el respecto, la comodidad, la confianza y la predisposición a ayudar siempre a nuestros mayores.
- Análisis DAFO: consiste en analizar las Debilidades, Amenazas, Fortalezas y Oportunidades del negocio. En base a esto se puede trazar una estrategia más adecuada.
- Recursos necesarios: se refiere a todos los recursos materiales, humanos y técnicos necesarios para poner en marcha y mantener el negocio.
- Análisis de costes: básicamente, consiste en poner de relieve la relación que existe entre la inversión necesaria y los ingresos previstos.
Requisitos para crear una residencia de ancianos
Entre los requisitos para montar una residencia de ancianos se pueden nombrar aspectos éticos y vocacionales. Es decir, es un tipo de negocio para personas que tengan la vocación de cuidar y ayudar a las personas mayores, capaces de brindar un trato formal, respetuoso, delicado y cariñoso. Hay que tener en cuenta que un porcentaje importante de las personas que residen en estos centros tienen achaques propios de su edad: discapacidades, problemas de movilidad o motricidad, o enfermedades crónicas.
Por otra parte, es obligatorio cumplir con una serie de trámites necesarios para la creación de una empresa. También es básico cumplir con la normativa de cada Comunidad Autónoma para la concesión de las licencias de apertura. Más adelante profundizaremos más en estos aspectos.
Por último, otro punto muy importante al montar una residencia de ancianos es contar con personal que tenga la formación adecuada: médicos, profesionales sanitarios, fisioterapeutas, cocineros, conductores para transporte, monitores de ocio y tiempo libre, etc.
¿Qué forma jurídica elegir para la residencia?
La forma jurídica más recomendada para montar una residencia de ancianos es la Sociedad limitada. Este tipo de sociedad no requiere una gran inversión en capital social (3.000 euros), el número de socios va desde 1 hasta un número ilimitado, y la responsabilidad de los mismos se limita al capital aportado.
Los pasos para la creación de una residencia de mayores como S.L son:
- Obtener la denominación social
- Abrir una cuenta bancaria exclusiva para la sociedad, en la que se depositará el capital social
- Definir los estatutos sociales
- Firmar la escritura pública ante notario
- Obtener NIF provisional en el Registro Mercantil
- Darse de alta en el censo de empresas y en el Impuesto de Actividades Económicas
- Inscribirse en el Registro Mercantil
- Solicitar el NIF definitivo
Además, en función de cada Comunidad Autónoma también se te pedirán otros requisitos:
- Obtener la licencia de apertura o de funcionamiento, que otorga la autorización para desarrollar una actividad económica en el local.
- Permiso de obras, para la adaptación o remodelación del local.
- Cambio de titularidad, si el negocio tenía otro propietario.
- Registro de marcas y signos distintivos, si vas a lanzar tu propia marca.
- Tasa de recogida de basuras.
- Etc.
Lo mejor es que te informes de los requisitos en el ayuntamiento. Y si necesitas ayuda con toda la documentación necesaria, te aconsejamos que consultes a una asesoría, ya que los trámites burocráticos pueden ser tediosos.
Instalaciones, equipos y empleados
Las instalaciones de una residencia de ancianos deben tener todo lo necesario para adecuar el entorno a las necesidades de las personas mayores dependientes.
Local
Los requisitos son impuestos por cada Comunidad Autónoma, por lo que pueden variar entre regiones. Con carácter general, suelen ser los siguientes:
- Los centros residenciales pueden tener una o más unidades de convivencia.
- Cada unidad debe tener habitaciones privadas para cada residente y zonas comunes de convivencia.
- Los departamentos de las unidades de convivencia deben estar conectados entre sí.
- Cada habitación debe tener una superficie mínima y un determinado ancho libre en las puertas. En Castilla y León, por ejemplo, la superficie mínima de cada habitación debe ser de 19 m2 y el espacio libre en las puertas de 78 cm.
- Las habitaciones también deben tener baño con ducha, TV, teléfono e internet.
- Las zonas comunes también deben tener una superficie mínima. Siguiendo el ejemplo de Castilla y León, esta superficie mínima es de 5,60 metros por residente, y un mínimo de 30 m2 por zona común.
Asimismo, te recomendamos que consultes los requisitos del ayuntamiento respecto a:
- Zonas de tránsito
- Ascensores
- Despacho de dirección
- Sala de actividades
- Recepción
- Zona administrativa
- Sala de visitas
- Enfermería
- Cocina
- Almacenes
- Lavandería
- Baños y aseos
- Zonas al aire libre
- Iluminación
- Ventilación
Mobiliario
El mobiliario de una residencia de ancianos debe estar enfocado a ofrecer funcionalidad y confort a partes iguales:
- Comedor y sala de estar: mesas, sillas, sillones, sofás, armarios, estanterías, etc.
- Habitaciones: camas, armarios, mesitas de noche, baños y aseo, espejos, etc.
- Recepción y sala de dirección: mostrador, estanterías, armarios, etc.
- Sala de actividades y fisioterapia: camillas, estanterías y baldas.
- Cocina: lo necesario en cualquier cocina de restaurante.
En general el mobiliario no tiene por qué diferir del habitual en cualquier hogar o lugar de residencia común, procurando la mayor comodidad para los inquilinos.
Equipo y accesorios
Una residencia de ancianos debe tener el equipamiento de cualquier casa, más todo aquello que se necesita para el cuidado y atención de personas mayores:
- Accesorios de ayuda a la movilidad: sillas de ruedas, bastones, andadores, barandillas, cinturones perineales y abdominales, grúas de bipedestación, etc.
- Accesorios y productos para el cuidado de los mayores: pañales, carros de medicación, dispensadores y trituradores de pastillas.
- Otros accesorios y productos: baberos, cuñas, orinales, portagoteros, mantas eléctricas, cojines viscoelásticos, contenedores para pañales, sábanas desechables, toallitas absorbentes, productos de limpieza.
- Accesorios para la sala de fisioterapia: los que considere oportunos el profesional encargado del departamento: estetoscopio, tensiómetro, martillo para reflejos, etc.
- Aire acondicionado y calefacción.
- Equipamiento completo de la cocina.
- Equipos informáticos.
Seguro que se nos olvida alguna cosa. En todo caso, cuanto notes que falta algo fundamental en tu equipo, haz acopio de ello lo antes posible.
Empleados
¿Quieres montar una residencia de ancianos con otros emprendedores geroasistenciales? Entonces vas a necesitar la ayuda de un completo equipo profesional.
Hay numerosos especialistas que pueden tener cabida dentro de una residencia de ancianos, en función de la atención que se brinde:
- Director o gerente
- Médico de geriatría
- Gerontólogo
- Gerocultor
- Psicólogo o pisquiatra
- Trabajadores y educadores sociales
- Enfermeras especializadas en tercera edad
- Auxiliares de enfermería
- Fisioterapeutas
- Terapeuta ocupacional
- Animador sociocultural o monitores de tiempo libre
- Personal administrativo
- Conductor
- Personal de cocina
- Limpiadoras
- Personal de mantenimiento
- Recepcionista
No siempre es necesario tener todos estos profesionales. Por ejemplo, una residencia de día o un centro de ocio para mayores no requerirá médicos o enfermeras especializados en geriatría.
¿Cuanto cuesta montar una residencia para la tercera edad?
Depende del tipo de residencia, su superficie y el número de residentes que va a albergar. Puedes hacerte una idea muy general con este ejemplo de presupuesto:
- Gastos de establecimiento (trámites para licencias, permisos y notaría): 1.300 euros
- Adaptación del local: 25.000 euros
- Mobiliario: 25.000 euros
- Equipamiento: 20.000 euros
- Productos, stock inicial: 7.000 euros
- Utensilios de trabajo: 3.000 euros
- Equipos informáticos: 3.000 euros
- Fianza (2 meses): 7.000 euros
- Fondo de maniobra (para cubrir gastos iniciales de alquiler, Seguridad, sueldos de trabajadores, asesorías, marketing, etc): 150.000 euros
- TOTAL: 241.300 euros
Puede parecer un coste elevado, más teniendo en cuenta que la rentabilidad de las residencias de ancianos se sitúa entre un 15% y un 25% sobre el total de ingresos. Sin embargo, también es posible acceder a planes de financiación para suavizar el impacto inicial:
- Financiación propia: a través de dinero, bienes o especies del propio emprendedor.
- Financiación ajena: mediante bancos, inversores, entidades de capital riesgo, sociedades de garantía recíproca, etc.
- Subvenciones públicas: son ayudas provenientes de las Administraciones con el objetivo de fomentar el emprendimiento.
Administración, gestión y normativa aplicable
¿Cómo organizar una residencia de ancianos? A la hora de gestionar un centro de día o un local asistencial para personas mayores, es necesario tener en cuenta todo lo relativo a la normativa para residencias de la tercera edad. En los siguientes puntos vemos algunas de las obligaciones más importantes en materia fiscal, contable o laboral.
Obligaciones fiscales y contables
Obligaciones fiscales:
Al principio del artículo comentamos que la forma jurídica más recomendada para montar una residencia de ancianos es la Sociedad Limitada. En ese caso, las obligaciones contables pasan por hacer frente al pago del Impuesto de Sociedades.
Obligaciones contables:
Las Sociedades Limitadas tienen mayores obligaciones que los autónomos en este apartado. Entre los documentos contables que hay que tener en regla y entregar en plazo están:
- Inventario
- Cuentas anuales
- Libro de ingresos y gastos
- Libro de actas
- Registro de socios
- Libro de registro de la sociedad
- Libros de facturas emitidas y recibidas
- Registro de bienes de in versión
- ROI o Registro de operaciones intracomunitarias.
Este es uno de los aspectos más complejos de gestionar una residencia de ancianos. Si quieres olvidarte de problemas, lo mejor es contratar una asesoría contable.
Formación necesaria para ejercer
Ya no es posible trabajar en una residencia de ancianos sin formación. El convenio del sector establece cuatro categorías profesionales distintas:
- Grupo A: Gerentes, administradores y titulados superiores
- Grupo B: Titulados medio y gobernantes, de las ciencias humanas y sociales.
- Grupo C: Personal técnico y personal auxiliar.
- Grupo D: Personal subalterno y personal no cualificado.
Entre los estudios necesarios para trabajar en una residencia de ancianos están los relacionados con el ámbito de la salud física:
- Medicina
- Enfermería
- Auxiliar de enfermería
- Fisioterapeuta
- Rehabilitación
También se puede hacer formación relacionada con:
- Psicología
- Psiquiatría
- Gerontología
Por otro, existe la posibilidad de trabajar en una residencia para personas mayores teniendo estudios de:
- Educación social
- Trabajador social
Una formación que está muy de actualidad para este tipo de centros es la Terapia Ocupacional.
Por último, dentro de una residencia también hay puestos de trabajo que requieren otro tipo de formación específica, por ejemplo para trabajar en cocina o para transporte de personas.
Normativa Laboral
La Ley que establece la normativa laboral en las residencias de ancianos es el VI Convenio colectivo marco estatal de servicios de atención a las personas dependientes y desarrollo de la promoción de la autonomía personal.
Este marco normativo establece una jornada anual máxima para este colectivo de 1.792 horas. En el caso de los servicios de atención a domicilio se limita a 1.755 horas. Esta jornada puede ser distribuida de forma irregular por la empresa, con un máximo del 10% de las horas.
La jornada de trabajo diaria máxima es de 9 horas al día, salvo que existan más de 12 horas entre el final de una jornada y el comienzo de la siguiente, y haya mutuo acuerdo entre la empresa y el trabajador o sus representantes sindicales.
Cuando la jornada de trabajo supere las 6 horas diarias, será obligatorio establecer un período de descanso mínimo de 15 minutos.
En cuanto a las jornadas a tiempo parcial, deben ser continuadas, salvo las realizadas en sábados, domingos y festivos.
Las jornadas partidas tendrán una duración mínima de 24 horas semanales. Se considerará que una jornada es a turno partido cuando exista un descenso mínimo de una hora.
El descanso semanal es de un día y medio. El descanso debe darse de forma obligatoria en domingo, al menos una vez cada cuatro semanas (exceptuando el personal con contratos específicos de fin de semana).
Por su parte, el período de vacaciones será de 2,5 días naturales por mes trabajado, es decir, 30 días naturales por año trabajado.
Por su parte, el período de prueba dependerá de la categoría del profesional marcada por convenio:
- Grupo A: Seis meses
- Grupo B: 45 días laborables
- Grupo C: 30 días laborables
- Grupo D: 20 días laborables
Transformación digital en el sector de las residencias geriátricas
La tecnología avanza a pasos agigantados. No solo sirve para la promoción de la residencia en internet, sino para mejorar la atención a nuestros adultos mayores.
Página web
Hoy en día es imprescindible para cualquier negocio tener una página web. Lo mismo ocurre si quieres montar una residencia de ancianos. Es el escaparate del centro en internet y una importante fuente de clientes potenciales.
En la página web de una residencia de ancianos debe haber las siguientes secciones y categorías:
- Inicio: página de entrada donde se agrupa la información principal.
- Servicios: descripción de los servicios que ofrece la residencia a los ancianos.
- “Sobre nosotros“: una descripción de quién es la empresa, su fundación, cuáles son sus valores o los profesionales que trabajan en ella.
- Instalaciones: es muy importante que las personas mayores y sus familiares puedan darse una vuelta virtual por las instalaciones de la residencia para comprobar si puede adaptarse a lo que buscan.
- Servicios: haciendo hincapié en aquellos servicios de asistencia en los que está especializada la residencia.
- Precios: distinguiendo entre tarifas de atención general y otras para asistencia más específica y personalizada.
- Blog: para ofrecer información actualizada y de interés sobre el sector geriátrico o sobre nuestros mayores. También sirve para publicitar iniciativas sociales en las que se haya involucrado el centro.
- Centros: imprescindible si se trata de una empresa con varios centros de asistencia a la tercera edad.
- Contacto: para que se puedan poner en contacto con la residencia.
- Política de privacidad, aviso legal y política de cookies: para cumplir con el RGPD (Reglamento General de Protección de Datos) y la LOPDGDD (Ley Orgánica de Protección de Datos y Garantía de Derechos Digitales).
En la actualidad crear una página web es muy sencillo, lo único que se necesita es lo siguiente:
- Hosting: un servidor en el que alojar la web. Un hosting de pago estándar puede rondar entre los 50 y 100 euros/año. Algunas de las empresa más conocidas y fiables son Arsys, Webempresa, Hostalia o Raiola Networks.
- Dominio: es el nombre de la web, la URL que aparece en la barra de direcciones, y que se asigna a tu servidor. La mayoría de empresas proveedoras de hosting también permiten contratar dominios. Es importante que los dominios estén libres, puedes comprobarlo en DonDominio. El coste de un dominio es de apenas 8-15 euros anuales.
- Correo electrónico de empresa: los proveedores de hosting también ofrecen la posibilidad de crear varios correos electrónicos exclusivos. Esto da mayor aspecto de seriedad, ya que en lugar de “miresidencia@gmail.com” el correo podría ser “info@miresidencia.com”, lo cual da una sensación de mayor profesionalidad.
- CMS o creador de contenidos: de nuevo, la mayoría de proveedores de hosting te permiten añadir directamente un creador de contenidos, es decir, la plataforma sobre la que vas a construir la web. Lo más conocidos son WordPress (que también ofrece hosting y dominio), Joomla, Drupal, etc.
Dicho de otro modo, la página web no costará más de 120 euros al año. Otra cosa ya es el dinero que se invierta en marketing digital (anuncios en Google, publicidad en redes sociales, herramientas SEO, etc).
Redes sociales
Por supuesto, a la hora de promocionar en internet una residencia de ancianos no se pueden dejar de lado las redes sociales. El perfil del centro no puede faltar en redes como:
- Facebook: la red más generalista y con mayor número de usuarios.
- Twitter: para noticias o contenidos de actualidad.
- Instagram: para mostrar fotos del día a día de la residencia.
- LinkedIn: si quieres estar en contacto permanente con profesionales del sector.
Algunos de los consejos que te podemos dar a la hora de manejar el perfil de la residencia en las redes sociales son:
- Actualizar de forma periódica, que el perfil tenga “vida”.
- Ofrecer contenido interesante y que aporte valor.
- Responder las preguntas y dudas de los usuarios.
- Ser amable, evitar entrar en polémicas o discusiones en público.
- Compartir contenidos de otros, pero con moderación, solo información pertinente para el perfil de la residencia.
Software de gestión de residencias
Existen programas de gestión de residencias que permiten llevar un control casi automatizado de todos los aspectos de un centro geriátrico.
Este tipo de software ofrece numerosas ventajas:
- Permiten planificar los cuidados y la atención de los residentes.
- Se integran con otros sistemas contables o financieros.
- Están conectados con numerosos hospitales o centros de salud.
- Organizan la información de cada residente y sus características particulares (clínicas, psicológicas, etc.).
- Permiten realizar un seguimiento de tratamientos, medicación, etc.
- Se adaptan a diferentes modelos de gestión de calidad: ISO 9000, EFQM o UNE158000.
- Facilitan la comunicación entre residencia y familiares.
Entre los software para residencias más recomendables se pueden citar los siguientes:
- Gerosalus
- GdR (Gestión de Residencias)
- ResiPlus
- EcoSocialCS
- Geriges
- Resiges
Migración de datos a la nube
Otra de las posibilidades para agilizar y simplificar la gestión de la residencia es contar con una plataforma que ofrezca una base de datos en la nube. De esta manera, la información no se guardará en los equipos informáticos de la residencia y estará a salvo de averías o pérdidas repentinas.
Es una solución especialmente indicada para centros asistenciales con un número elevado de residentes, o para cadenas con varias residencias.
Un ejemplo es AMAVIR. Este grupo cuenta con más de 40 residencias en España y recientemente ha migrado toda su información al Data Center que Telefónica tiene en Alcalá. Se trata de un centro de almacenamiento de datos en la nube que ha sido el primero del mundo en obtener la certificación TIER IV Gold.
Promoción offline
No se deben descartar las acciones de marketing offline para dar a conocer una residencia de ancianos. Eso sí, recuerda que en muchas ocasiones quienes tomar la decisión son los familiares o descendientes directos como hijos, nietos o sobrinos.
Entre las acciones de promoción offline que se pueden llevar a cabo están:
- Organizar visita al centro para que los ancianos y sus familiares puedan conocer las instalaciones, a los profesionales del centro y, en definitiva, el ambiente que se respira.
- Colaborar con otras asociaciones o centros de salud.
- Participar en iniciativas sociales o de ayuda a la comunidad, en especial a las personas de la tercera edad.
- Colocar anuncios en prensa local (medios escritos, radio, periódicos, televisión local
- Publicitarse en revistas especializadas.
- Otras iniciativas a realizar con moderación: buzoneo, reparto de flyers, etc.
Ideas brillantes para que te inspires
Está claro que en una residencia de ancianos lo más importante es la atención que se brinda a las personas mayores. Pero, ¿cómo conseguir que una residencia de la tercera edad destaque sobre la competencia? La clave es ofrecer la mejor asistencia, pero además, complementarlo con otros servicios que la diferencien de otros centros:
- Terapias con animales: ya hay ejemplos de residencias que organizan encuentros de los ancianos con animales. Es una iniciativa que llena de alegría y renovada vitalidad el centro y que saca una sonrisa a todos los residentes.
- Redes sociales manejadas por los residentes: se puede enseñar a los mayores a usar internet, y todavía más, dejar que sean ellos quienes lleven las redes sociales o el Blog de la residencia (siempre y cuando lo permita su estad físico y mental).
- Apostar por el Hospitality Design: se trata de una tendencia que busca acercar las residencias al diseño hotelero y alejarlo de la imagen de institución que tienen aparejadas. Son centros que incluyen mobiliario alejado de la imagen tradicional de las residencias, que incluyen comedores separados o que tienen servicio de conserjería, para que los residentes sientan que están en una especie de hotel y no en una institución asistencial.
- Salas Snoezelen: es un concepto que llega desde Holanda. Son habitaciones destinadas a la estimulación multisensorial, especialmente indicadas para personas con demencia y problemas cognitivos y sensoriales.
- El cajón de los recuerdos: una iniciativa que pretende recoger todos los recuerdos, y experiencias de los residentes a lo largo de su vida. Las personas mayores tienen muchas cosas interesantes que contar. Estas vivencias pueden recogerse en un libro para ser publicadas, o grabarlas en vídeo y mostrarlas al mundo a través de un canal de Youtube.
Esto ha sido todo por nuestra parte. Esperamos que tengas un poco más claro cómo se pueden montar y gestionar residencias geriátricas. Un negocio que requiere inversión y vocación, pero que a cambio ofrece una gran satisfacción a sus profesionales.
Otros negocios que puedes montar