Aparte de los ERTE, las empresas han recurrido a otras medidas para intentar mantener el empleo durante la crisis provocada por el Covid-19, tal y como muestra el informe publicado por la consultora PeopleMatters.
A estas alturas, todos somos conscientes de las graves consecuencias para el empleo que la pandemia de Covid-19 está teniendo en España, con la destrucción en abril de más de 280.000 puestos de trabajo. Sin embargo, muchas empresas han intentado poner freno a esta destrucción de empleo recurriendo a diferentes medidas para intentar mantener a toda su plantilla.
Aunque el ERTE ha sido la fórmula mayoritariamente promovida por el Gobierno, no ha sido la medida más usada por las empresas, que han preferido implementar otras políticas para contener los costes derivados del parón de la actividad económica. En el informe elaborado por PeopleMatters, el 28% de las empresas (de las cuales el 60% con menos de 1.000 empleados) analizadas cada dos semanas desde el comienzo de la crisis sanitaria, habría recurrido al ERTE. Aunque el porcentaje aumenta según pasan los días.
En cuanto al tipo de ERTE, al principio se recurrió al de fuerza mayor por el Covid-19, puesto que incluía facilidades como no pagar las cotizaciones sociales. Pero con el paso del tiempo, se empieza a emplear más el ERTE por causas técnicas, económicas y de producción. Aún así, son muchas las empresas que intentan mantener el empleo sin recurrir a estos mecanismos excepcionales.
Muchas empresas optan por el teletrabajo, dar vacaciones, reducir la jornada laboral o conceder permisos no retribuidos para evitar despidos
El impacto sobre los paquetes retributivos y las prácticas laborales
El informa elaborado por PeopleMatters tiene como fin analizar el impacto que el Covid-19 está teniendo tanto en los paquetes retributivos como en las prácticas laborales de las empresas, para lo que se han estudiado 126 sociedades, la mayoría de ellas cotizadas y con más de 500 empleados.
La mayoría de las empresas analizadas crearon una comisión de seguimiento del ERTE y el 49% de aquellas empresas que aplicaron un ERTE por causas económicas, técnicas o de producción ha acordado una fecha de finalización, si bien, esta se va ampliando de manera significativa según avanza la situación. Solo el 12% de las empresas analizadas no acordaron en negociación colectiva poner fecha de finalización al expediente de regulación de empleo temporal.
En cuanto a las retribuciones, el 49% de las empresas estudiadas (la mayoría de menos de 3.000 empleados) no complementa el salario de sus trabajadores. Del 51% que sí hace aportación en ese sentido, el 67% lo hace sobre la prestación por desempleo y el tanto por ciento restante sobre el salario fijo.
Estas medidas para complementar la retribución crecen según avanzan las semanas, a pesar de que el 46% de las empresas no tiene establecido ningún tipo de complemento, el 37% lo compensa con vacaciones y pagas extra, con un 9% que ofrece anticipos de la nómina a los trabajadores.
Otras formas para mantener el empleo
Cómo decíamos al principio, la mayoría de las empresas no habría recurrido al ERTE para mantener el empleo, sino a otras fórmulas, especialmente el teletrabajo. De manera que el 99% de las empresas analizadas que han podido recurrir a esta opción para mantener la actividad, lo han hecho.
Por otro lado, el 35% de las empresas decidieron dar vacaciones a sus empleados, el 24% diseño una bolsa de horas, el 23% ha realizado una distribución desigual de la jornada laboral, el 10% ha aplicado una reducción de jornada y en la misma medida se han concedido permisos no retribuidos y se han congelado los beneficios.
Así mismo, se ha pospuesto la retribución variable anual y una reducción salarial a todo el colectivo de empleados o a una parte. Respecto a la retribución del primer ejecutivo de la compañía, el 72% de las empresas no ha reducido su compensación, mientras que el 22% sí ha reducido el salario fijo entre un 5% y un 20%, y el 6% ha tocado el variable.