Helena HernándezLas nuevas previsiones del Gobierno sobre el crecimiento de la economía española rebajan en dos décimas las cifras la proyección oficial para 2020.
De acuerdo a las declaraciones de la vicepresidente económica, Nadia Calviño, y la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, sobre las nuevas previsiones contenidas en cuadro macroeconómico hasta 2023 y de la nueva senda de objetivos de déficit y deuda pública hasta final de la legislatura, la economía española crecerá un 1,6% en 2020.
Esa cifra supone dos décimas menos de lo que venían augurando las previsiones del Ejecutivo, que situaban la previsión de crecimiento para este año en un 1,8%. De acuerdo al nuevo cuadro, el crecimiento tocará suelo en 2021, con una tasa del 1,5%, y comenzará recuperarse de cara a 2022, con una tasa del 1,6%, hasta alcanzar el 1,7% en 2023 (último año de la legislatura del Gobierno actual PSOE-Unidas Podemos si no se producen elecciones anticipadas).
En un contexto internacional inestable, el Gobierno apuesta por una previsiones de crecimiento prudentes
Inestabilidad y prudencia
“El contexto internacional relativamente volátil nos hace abordar el escenario macroeconómico nacional siguiendo un principio fundamental, que es el principio de prudencia. Y es en este contexto en el que hemos elaborado un escenario macroeconómico 2020-2023 prudente, donde se prevé que la economía española mantenga una senda de crecimiento”, dijo Calviño, quien también enumeró una serie de “riesgos” que han llevado al Gobierno a revisar su previsión de crecimiento, como el reciente finalizado Brexit, las guerras comerciales entre EE.UU. y China o la aparición de “nuevas amenazas de tipo geopolítico o incluso de tipo sanitario”.
El Ejecutivo español no fue el único en revisar sus previsiones de crecimiento económico, la Comisión Europea también puso al días sus proyecciones para la economía española, que coinciden con las del Gobierno; elevó en una décima su previsión de crecimiento para España para esta año y el siguiente, hasta el 1,6% y 1,5% respectivamente. Así, mismo, también revisó al alza su estimación de crecimiento del PIB español para 2019, hasta el 2%.
Tras estas actualizaciones del Gobierno español y de la Comisión Europea, las proyecciones de crecimiento para España coinciden con las del Fondo Monetario Internacional (FMI), que ya publicó su informe en enero.
La desaceleración de la economía española
Esta revisión de la previsión de crecimiento de la economía española no solo viene propiciada por la situación internacional, también se tienen en cuenta los informes trimestrales del Instituto Nacional de Estadística (INE), que han venido probando que nuestra economía ha comenzado un proceso de desaceleración.
Así, en el último informe del INE publicado el 31 de enero sobre el último trimestre de 2019, así como del ejercicio conjunto, se anunció que el PIB creció un 2% el año pasado, su menor tasa en cinco años, y cuatro décimas menos que 2018, cuando alcanzó el 2,4%.
Esta desaceleración de la economía española se debe a factores tanto internos como externos, como el proteccionismo general, el precio del petróleo, la incertidumbre política, el freno en la creación de empleo, un menor consumo y la caída de la confianza empresarial, que ha frenado la inversión.
España lideraría el crecimiento económico en la zona euro
De acuerdo con las previsiones del Gobierno y de la Comisión Europea, la economía española crecería por encima de la media de la eurozona, cuya tasa se quedaría en el 1,2% en 2020 y 2021, igual que en 2019, y de la Unión Europea, con una tasa para ambos casos del 1,4%, una décima menos que el año pasado.
España lideraría el crecimiento económico de las principales economías de la zona euro en los próximos dos años, seguida de Holanda (1,3% para ambos ejercicios), Francia (1,1% en 2020 y 1,2% en 2021), Alemania (1,1% ambos años) e Italia (0,3% y 0,6%).
